El ex toletero de los Cardenales de San Luis, Mark McGwire eligió el año 2010 para admitir públicamente que consumió esteroides, que engañó a todos y que su récord de jonrones de 1998 fue producto del dopaje.
Al igual que sucedió cuando se presento ante el Congreso de Estados Unidos, en el 2005, para decir que no tenía que hablar del pasado, McGwire esta vez, tras seleccionar el momento oportuno, su vuelta a la competición activa como entrenador de bateo de los Cardenales, si confesó lo que era un secreto a voces.
La actitud ante el Congreso hundió por completo la reputación del toletero que quedó marginado de las Grandes Ligas.
Su admisión pública del consumo de esteroides llegó acompañada de la petición de perdón para todos, especialmente dedicado al piloto de los Cardenales, Tony La Russa, el "ingenuo", que siempre defendió que estaba "limpio", a pesar de todas las evidencias presentadas por el cubano José Canseco, su ex compañero.
De nuevo, Canseco emerge como el gran triunfador y verdadero impulsor de iniciar toda la denuncia, con hechos irrefutables, de la trágica trama de dopaje que se vivía dentro del deporte del béisbol profesional de las Grandes Ligas.
Ahora, McGwire admitió que nunca pensó que podría hacer la confesión pública del consumo de esteroides en diversos periodos de su carrera profesional, como puntualmente había denunciado Canseco, su ex compañero de equipo (Atléticos de Oakland), en su libro sobre dopaje en la llamada "era de los esteroides".
También reconoce que no hubiese deseado nunca haber consumido esteroides, pero gracias a la ayuda del dopaje logró marca de 583 jonrones en las 16 temporadas que estuvo con los Atléticos y Cardenales, equipo con el que en 1998 superó la marca de todos los tiempos de cuadrangulares para una temporada con 70.
Luego la misma fue batida por Barry Bonds, en el 2001, otro de los ex peloteros que están marcados por la sospecha del consumo de substancias prohibidas y además de encontrarse en la fase de enfrentar cargos criminales en su contra por haber mentido bajo juramento.
McGwire también empleó la hormona del crecimiento humano, según una fuente próxima al ex toletero que pidió no ser identificada debido a que el ex pelotero no incluyó ese detalle en su declaración personal.
McGwire también empleó la hormona del crecimiento humano, según una fuente próxima al ex toletero que pidió no ser identificada debido a que el ex pelotero no incluyó ese detalle en su declaración personal.
La decisión de McGwire de reconocer el uso de esteroides se precipitó tras aceptar el puesto de entrenador de bateo de los Cardenales y la prensa local había pedido al equipo que necesitaban hablar directamente con su nuevo fichaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario